El Congreso decidió asumir el rol institucional de repudiar el “golpe de estado” en Bolivia contra el presidente Evo Morales, ante la insistencia del presidente Mauricio Macri y el canciller Jorge Faurie en negar la ruptura democrática en el país vecino. Los bloques de la oposición convocaron a sesiones especiales para este miércoles en la Cámara de Diputados y el Senado, en las que se instará al Gobierno argentino a rechazar el quiebre democrático y reclamar la restitución del orden constitucional. También lo exhortará a condenar las violaciones a los derechos humanos y a “brindar asilo” para “proteger las vidas” de los funcionarios del Gobierno Plurinacional depuesto, y las de sus familiares, ante la persecución de los golpistas. En tanto, Cambiemos busca redactar un texto que lime diferencias entre las posiciones encontradas de radicales y macristas frente al quiebre del orden constitucional en Bolivia, para bajar al recinto con un texto común que no los muestre divididos antes de abandonar el gobierno y regresar al llano como oposición.
En Diputados, la oposición formalizó este martes la convocatoria para la sesión especial del miércoles a las 15,30 (tras el receso del lunes por el día del trabajador legislativo) para tratar cinco proyectos de repudio al golpe de Estado en Bolivia. Algunos de los cuales van desde “instar al inmediato cese del golpe de estado y la injerencia de las Fuerzas Armadas y de seguridad” y apelar al “restablecimiento del orden constitucional y la democracia” hasta “rechazar y repudiar el Golpe y las reiteradas y sistemáticas violaciones a los derechos del pueblo, cometidos por fuerzas policiales del Estado y los militares”.
En el último párrafo del texto sostienen que “exhortamos al Poder Ejecutivo a que, en virtud del quiebre democrático ocurrido en el hermano país, conceda asilo a cualquier integrante del gobierno encabezado por Evo Morales Ayma que así lo solicitara, a fin de garantizar la protección de su vida, su libertad e integridad, y la de su familia”. Un llamado de atención para la Cancillería argentina que, en un primer momento, cerró las puertas de su embajada y de los consulados en medio de la cacería que los golpistas lanzaron contra los miembros del gobierno derrocado.
Nota via: Página12