Tokio elevó a 76 el número de ciudadanos rusos cuyos activos fueron bloqueados, entre quienes figura el presidente Vladimir Putin.

La guerra podría modificar la estrategia de defensa japonesa frente a las ambiciones regionales chinas.
Rusia anunció la suspensión de las negociaciones de paz con Japón, que mantenía por temas territoriales desde el final de la Segunda Guerra Mundial, luego de las sanciones impuestas por Tokio y a raíz de lo que el Kremlin calificó como una “posición inamistosa” ante el conflicto en Ucrania.
Japón se unió a las potencias occidentales en las últimas semanas para imponer duras sanciones económicas a Moscú por su ofensiva en Ucrania lanzada el 24 de febrero. La guerra podría modificar la estrategia de defensa japonesa frente a las ambiciones regionales chinas y abrirle una puerta a quienes piden mayor gasto militar en el país, según advierten analistas.
“Rusia no tiene intención, en las circunstancias actuales, de continuar las negociaciones con Japón sobre un tratado de paz“, dijo la Cancillería rusa en un comunicado. Para el Kremlin es “imposible hablar de la firma de un documento fundamental sobre las relaciones bilaterales con un Estado que tiene una posición abiertamente inamistosa y busca perjudicar los intereses” de Rusia.
Rusia anunció que bloqueará la designación de Japón como socio de la Organización de Cooperación Económica del Mar Negro, una estructura creada a inicios de la década de los 90 para impulsar la cooperación económica de los países de esa zona.
Desde el Kremlin lamentaron el “rumbo antirruso” que tomó Japón en las últimas jornadas y mostraron su decepción ante el hecho de que el país asiático haya abandonado el desarrollo de “una cooperación mutuamente beneficiosa y una buena vecindad”.
Después de la Segunda Guerra Mundial, ambas naciones no firmaron un tratado de paz debido a una disputa sobre cuatro pequeñas islas del archipiélago de las Kuriles, un grupo de islas ocupadas por el ejército soviético los últimos días del conflicto y que, desde entonces, no han sido restituidas a Japón, que los llama los “Territorios del Norte“. Si bien hubo intentos de negociación desde la caída de la URSS, nunca han tenido éxito.
En los últimos días, Japón elevó a 76 el número de ciudadanos rusos cuyos activos fueron bloqueados, entre quienes figura el presidente, Vladimir Putin, así como 12 bielorrusos, entre los que se encuentra su par Alexander Lukashenko.
Japón, al igual que otros países del G7 y la Unión Europea (UE), ha aplicado sucesivas rondas de sanciones a Rusia desde que empezó el conflicto, entre las que también se incluye la exclusión de bancos rusos del sistema Swift.
Fuente:Página12